Tenemos diez razones para afirmar que somos un club diferente:

1. Creemos que el mundo de la equitación no debe ser un mundo “exclusivo”.
2. No somos “puristas” de una disciplina en concreto. (No obstante, consideramos que la Doma Clásica es un pilar en la equitación.)
3. Nos gusta todo lo relacionado con el caballo. No exclusivamente montarlo. Cuando consideramos, aprendemos “pie a tierra”. Desde la etología básica, hasta la nutrición.
4. Nuestros caballos viven en los prados de libertad vigilada, desde el marzo hasta octubre. La cuadra, es “el último recurso”. Queremos que hagan más vida de caballo posible, que sean libres, en el sentido más equilibrado de la palabra. (Cuando vamos en el campo para verles, no se nos ocurre abrazarnos a los árboles… nos limitamos a contemplarles y aprender de ellos.)
5. En la medida de lo posible, nuestros alumnos llegan a ser autónomos. Capaces de coger el caballo del prado, cepillarlo y prepararlo para la clase.
6. Creemos que palabras como “disciplina”, “valentía” y “rigor” no son palabrotas.
7. De vez en cuando, nos gusta organizar fiestas con todos los socios del club. Básicamente comemos juntos, escuchamos música, y “nos contamos la vida” y las hazañas de amazonas y caballeros.
8. Montamos caballos versátiles, capaces de hacer una reprise de Doma Clásica, pero también ir de ruta o hacer El Camino de Santiago.
9. Cuando la Luna se vuelve llena, vamos a verla, en las ya míticas Rutas de Luna Llena.
10. Creemos que todo el mundo disfruta del caballo, pero realmente los que más lo aprovechan, son las personas que descubren el sentido a las palabras: "disciplina", "rigor" y "compromiso".